[Abril 2014] Nos ofrecieron la posibilidad de ir a pasar un fin de semana a Praga desde Maribor con ESN, a un evento con erasmus de todo Europa. Yo ya había estado en el verano de 2012, pero no me había quedado buen recuerdo, así que me apunté también.

El viaje fue en bus desde Maribor, haciéndose eterno tras 10h de «party-bus». Como íbamos en viaje organizado las horas de las comidas estaban programadas, así que el viernes por la tarde no nos dio tiempo a hacer nada antes de la hora de la cena. Después de cenar el plan era ir a  Mecca Erasmus Zoo, una discoteca de Praga. Lo único a destacar de esa discoteca es que me pareció sumamente cara comparando con los precios del resto de Praga, pero supongo que para el que le gusten las discotecas está bastante bien.

Afortunadamente, hay servicio de tranvías nocturnos, así que pudimos volver al hotel más o menos bien. Es decir, que al buscar hotel no hace falta que sea en el centro, que está bien comunicada con tranvías incluido por la noche.

Por la mañana teníamos unas charlas del evento al que supuestamente habíamos ido, pero ya que el día anterior no habíamos visto nada, no fuimos. Empezamos el día con un paseo por el centro, desde la ópera hasta el castillo. Es una gozada viajar en primavera, no había casi turistas por allí y puedes ver las cosas a tu ritmo y sin sentirte agobiado por tanta gente.

A la hora de la comida fuimos al beer garden de Riegrovy sady. Es una opción muy interesante si hace buen tiempo, ya que está muy agradable. En pleno centro de la ciudad un espacio verde bastante grande con un merendero donde comer cosas «de barbacoa» (que en realidad son salchichas, pero meh, puede pasar) y beber unas cervecitas checas tranquilamente.

Para completar nuestro recorrido de la tarde, quedamos con unos españoles residentes allí que se encargaron de enseñarnos la ciudad que ellos conocen y no solo la parte turística.

Ni siquiera fuimos a ver las sinagogas y el cementerio judío. En cambio, estuvimos paseando por el centro y callejeando, cenando en una taberna en la que no había turistas y esas cosas que se agradecen cuando viajas. Eso sí, no sé si para el primer viaje, ya que la Praga judía también se merece una visita.

Hablando de mi primer viaje allí, la sinagoga de Jerusalén, que no entra en los recorridos típicos, me pareció uno de los edificios más bonitos y llamativos que he visto.

Para terminar el día, dimos un paseo por la orilla del río, viendo los monumentos iluminados y disfrutando el buen tiempo.

Y para acabar el viaje, el domingo nos dio tiempo a más bien poco, a volver a pasear por los mismos sitios que ya habíamos estado y volver a Maribor en bus.

Consejillos:

• Cuidado con el cambio, que tienen a cobrar comisión más que en otros sitios donde he estado.
• El metro no es gratis, aunque lo parezca. Y ponen multas.
• El tranvía tiene bastantes frecuencias, por lo que no preocuparse de tener el hotel en el centro.
• La cerveza es más barata que el agua y el agua checa no tiene ninguna fama 😛